Qué debes saber del Adiro, uno de los medicamentos más vendidos en España #favoryto

En la lista de los medicamentos más vendidos cada año, hay uno que está siempre en el top 3, se trata de Adiro, un fármaco para prevenir los trombos del que se despachan en España unas 15 millones de unidades cada 12 meses. ¿Para qué sirve y quién tiene y quién no puede tomar este fármaco, que comparte principio activo con la Aspirina?

Qué es adiro y para que está indicado

El Adiro es una marca comercial cuyo principio activo es el ácido acetilsalicílico, el mismo que la tradicional Aspirina. La diferencia es que, en caso de este medicamento, la concentración es mucho menor, pues mientras que la Aspirina contiene 500 mg. de ácido acetilsalicílico, Adiro no tiene más de 300 mg. y el uso más extendido es el de 100mg. Es decir, cinco veces menos. Esta baja concentración de ácido acetilsalicílico hace que ya no sea efectivo como tratamiento antipirético, antinflamatorio y analgésico -como la Aspirina-, pero sí como antiagregante plaquetario, que es para lo que se receta.

La función de los antiagregantes plaquetarios es evitar que las plaquetas se agreguen para formar coágulos de sangre. La agregación de las plaquetas es muy algo muy útil para detener sangrados en caso de cortes o heridas, pero en poblaciones de riesgo, favorece la formación de trombos y de obstrucción arterial. Evitando la agregación de las plaquetas reduciremos, por tanto, el riesgo de padecer ictus, trombosis e infartos, pues la sangre es vuelve más líquida.

Así, el Adiro está indicado en la población que esté en riesgo de padecer trombos, ictus e infartos, que son básicamente, lo que ya han padecido un episodio de estas características alguna vez o que tengan más probabilidades de padecerlos, como:

•Tras un infarto de miocardio

•Después de una angina de pecho

•Después de una cirugía de angioplastia coronaria o by-pass coronario

•Tras haber padecido un accidente cerebrovascular no hemorrágico transitorio o permanente (ictus)

El tratamiento con Adiro es indefinido y a largo plazo.

Cómo se toma y qué efectos secundarios puede provocar

El Adiro debe tomarse a diario, un comprimido al día, y según recomienda la ficha técnica de CIMA (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios), “con un vaso de agua, preferentemente en ayunas y al menos una hora antes de las comidas. Los comprimidos no se deben triturar, romper o masticar para asegurar una liberación en el intestino”. Entre los efectos adversos más comunes del Adiro se encuentran:

•Debido a su efecto sobre la agregación plaquetaria, es frecuente que se produzca lo que conoce como hipoperfusión, una reducción de flujo de sangre que pasa a través de los órganos y tejidos del cuerpo. Esto puede aumentar el riesgo de sangrado (hemorragias) y anemia, que a su vez provoca cansancio, falta de hierro, palidez, mareos, tinnitus, etc.

•En cuanto a otros efectos adversos frecuentes (una persona de cada 10) encontramos los trastornos gastrointestinales (como úlceras, molestias gástricas, dolor, indigestión, saciedad prematura, vómitos, ardor…), respiratorios (espasmo bronquial, rinitis, congestión) o cutáneos (urticaria, erupciones...).

•Muy poco frecuentes son la insuficiencia renal o hepática, hemorragias graves o el síndrome de Reye, una enfermedad rara y grave que se caracteriza por inflamación a nivel de cerebro e hígado. Afecta especialmente a menores de 16 años con proceso febriles, gripe o varicela o con artritis.

Se puede consultar la lista completa de posibles efectos adversos en el prospecto.

En qué casos no debe tomarse Adiro

El Adiro está sometido a prescripción médica, por lo que antes de recetarlo, el médico valorará cuidadosamente si los beneficios de tomar Adio superan a los riesgos. Y es que, hay algunos casos en los que tomar ácido acetilsalicílico está contraindicado:

•Población pediátrica. No debe administrarse a niños menores de 16 años con proceso febriles, gripe o varicela, por el riesgo de Síndrome de Reye.

•Pacientes con insuficiencia hepática, cardiaca o renal graves por el riesgo de fallo renal, hepático o cardiaco.

•Pacientes alérgicos o sensibles al ácido acetilsalicílico.

•Personas con úlcera gástrica o que han padecido hemorragia o perforación gástrica.

•Pacientes con pólipos nasales asociados a asma.

•Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.

•Enfermedades que cursen con trastornos de la coagulación, principalmente hemofilia o hipoprotrombinemia.

También está contraindicado o debe valorarse cuidadosamente por el médico antes de recetarla, en caso de que se tomen determinados medicamentos, como:

•Metotrexato, medicamento para la artritis reumatoide.

•Algunos antiinflamatorios no esteroideos (AINEs), como ibuprofeno y naproxeno, pues pueden atenuar el efecto inhibidor sobre la agregación plaquetaria.

•Antidepresivos, como lo inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, pues aumentan el riesgo de hemorragia en general y digestiva.

•Antidiabéticos como insulina y sulfonilureas, pues el ácido acetilsalicílico aumenta su efecto hipoglucemiante y podrían favorecen las hipoglucemias.

•Diuréticos: en combinación con dosis altas de ácido acetilsalicílico, pueden ocasionar un fallo renal agudo, especialmente en pacientes deshidratados.

•Corticoides, al incrementar el riesgo de úlceras y de hemorragias gastrointestinales.

•Metamizol (Nolotil), que potencia el efecto antiagregante plaquetario.

•Otros como, los barbitúricos, algunos hipertensivos, el antibiótico Vancomicina, el litio o los antiácidos.

También se recomienda no tomar alcohol mientras dure el tratamiento con Adiro, pues incrementa significativamente el riesgo de padecer hemorragias digestivas.