TWS son las siglas de True Wireless Stereo y se refieren a una nueva especie de auriculares, totalmente sin cables, que en los últimos años han inundado el mercado tecnológico, con dispositivos de diferentes características y precios.
En lo primero que el usuario debe fijarse es en la calidad del audio y un buen indicativo de esta es el tamaño de los 'drivers' de los auriculares. Cuanto más grandes son mejor sonido suelen ofrecer, con graves más potentes y un sonido más rico en matices. Además, los más melómanos apreciarán la posibilidad de usar un ecualizador a través de la ‘app’.
Otro aspecto a tener en cuenta es la duración de la batería y, a pesar de su reducido tamaño, los TWS suelen tener buenas autonomías que pueden ir de 4 a 9 horas dependiendo del modelo.
Además, si los auriculares se pueden usar de forma independiente, el usuario puede duplicar su tiempo de escucha y las fundas de carga suelen tener la capacidad de rellenarlos de miliamperios varias veces. Es también importante el tiempo de carga, el tipo de conector y si cuentan o no con carga inalámbrica.
La cancelación de ruido –tanto activa (ANC) como pasiva– y el modo transparencia son dos características claves que permiten al usuario de TWS elegir si quiere aislarse del mundo o mantener una conversación sin quitarse los dispositivos de la oreja. Algunos auriculares ofrecen diferentes niveles de ANC y transparencia, pero se debe tener en cuenta que la mejor manera de escuchar el música es con estos modos apagados.
Muchos usuarios utilizan sus TWS para hacer deporte y dos aspectos clave en este apartado serán el agarre a la oreja, para poder dar tumbos sin miedo a que se desprendan, y la resistencia al sudor y al agua. Los auriculares de botón con estabilizadores internos de silicona o gel que se agarran al interior de la oreja suelen ser los mejores para hacer deporte sin miedo a que se caigan.
Poco espacio queda en unos dispositivos tan pequeños para colocar botones para controlarlos. La mayoría de fabricantes opta por soluciones táctiles que, a través de pulsaciones o gestos permiten modificar el volumen, la reproducción y las llamadas. Sin embargo, los mejores son los que optan por los más fiables botones físicos que evitan pulsaciones fantasma.
Precio: 230 euros (183 € en oferta).
La clave: Los más completos del mercado y con mejor sonido.
Lo mejor: Drivers de 12 mm, 11 niveles de ANC, 7 horas de batería más 25 horas en la funda, carga a inalámbrica y carga rápida. Se pueden conectar a dos dispositivos a la vez, como un ordenador y un móvil, priorizando el que emite sonido. Tienen un agarre preciso y cómodo y resistencia al agua IPX4. La calidad en las llamadas es muy buena. Los botones son físicos, evitando pulsaciones fantasma, y permiten controlar el volumen, la reproducción y las llamadas. La aplicación es muy completa, con alto nivel de personalización y ecualizador.
Lo peor: Su alto precio. Aunque son realmente cómodos, pese a su gran tamaño, a la hora de hacer deporte a veces da la sensación de que se van a caer si el usuario se mueve mucho. Al quitarse el auricular derecho el audio se detiene y no se puede modificar en la configuración.
Precio: 180 euros (117 en oferta).
La clave: Cómodos, premium y con muy buena calidad de audio y autonomía.
Lo mejor: Drivers de 11 mm con sonido firmado por JBL. Tiene 7 horas más 21 en la funda y los indicadores led muestran el nivel de carga. Además cuenta con recarga inalámbrica. El modo ANC y transparencia, resistente al sudor y cómodos para el deporte.
Lo peor: El auido en las llamadas es bueno, pero sufre en entornos ruidosos.
Precio: 130 euros.
La clave: Con forma de bala, tienen un gran sonido, buena autonomía y botones físicos que lo controlan todo.
Lo mejor: Los drivers de grafeno que dan un sonido rico en matices, la batería de 9 horas y los botones físicos que controlan hasta el volumen.
Lo peor: Su forma no apta para orejas pequeñas y no tienen cancelación de ruido.
Precio: 100 euros.
La clave: Buena calidad de sonido y cancelación de ruido lograda por menos euros.
Lo mejor: Son realmente cómodos de llevar, tienen un sonido excepcional y la cancelación de ruido y modo transparencia realmente funcionan.
Lo peor: La batería es de ‘solo’ 4 horas y los controles táctiles son algo limitados y pueden provocar pulsaciones fantasma.
Precio: 150 euros (75 en oferta)
La clave: La luz ultravioleta del estuche elimina las bacterias, su diseño es realmente cómodo y el sonido es agradable.
Lo mejor: Los únicos con limpieza integrada, tiene una batería de hasta 6 horas y los drivers de 6 mm dan buen resultado.
Lo peor: Los micros para llamadas no son su mayor virtud y la funda de carga ‘solo’ ofrece 12 horas extra de autonomía.
Precio: 70 euros.
La clave: A pesar de su reducido precio ofrecen un gran resutlado tanto en sonido como en llamadas y batería.
Lo mejor: Autonomía de hasta 10 horas, drivers de 10 mm y buen micrófono para las llamadas.
Lo peor: No tienen extras como la cancelación de ruido o la carga inalámbrica, pero por su precio, no se puede pedir más.
Precio: 50 euros.
La clave: Diseño único y carga inalámbrica en unos auriculares ecológicos.
Lo mejor: El toque distintivo de la madera de haya, un sonido decente para su precio, la carga inalámbrica y 8 horas de batería.
Lo peor: Los drivers de 6 mm no tienen tantos matices como la gama alta y el resultado del micrófono para las llamadas es ciertamente mejorable.
Precio: 10 euros.
La clave: Se escuchan y solo cuestan 10 €.
Lo mejor: El precio y la batería de hasta 4 horas más las 3 cargas extra de la funda.
Lo peor: El sonido, aunque bastante potente, es marcadamente metálico, la calidad de construcción es mala aunque de lejos dan el pego y los micrófonos para las llamadas pueden sacar de un apuro pero con ruido ambiente son inutilizables.
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