Gobierno “blindará” los terrenos vírgenes del Gran Santo Domingo

El Gobierno, en busca evitar el saqueo de los terrenos del Estado, lanzará un plan para “blindar” las zonas vírgenes que todavía quedan en el Gran Santo Domingo, donde miles de metros han caído en manos de particulares.

Se trata de “Santo Domingo 2050”, un proyecto para que todas las tierras que les quedan a la Dirección General de Bienes Nacionales, sean convertidas en un parque industrial, mediante decreto.

El plan podría ser lanzado en esta semana por el presidente de la República, Luis Abinader, junto al senador de la provincia Santo Domingo, Antonio Taveras Guzmán, según informó el mandatario en un encuentro con historiadores realizado en el Palacio Nacional.

Dentro de la estrategia gubernamental hay dos instalaciones que serán convertidas en áreas verdes en la capital.

En mayo pasado, el Poder Ejecutivo emitió el decreto 307-21, que modifica el 268-16, para que el inventario de la Comisión Evaluadora de los Terrenos Registrados, no solo abarque a los ingenios azucareros, sino también a todas las tierras en el territorio nacional.

La comisión, integrada por ocho personas y dirigida por Rafael Prebisterio Mejía Guerrero, tiene la tarea de auditar las operaciones inmobiliarias de que han sido objeto los terrenos, determinar la vocación del uso, hacer eficientes los actos de levantamientos, modificaciones y actualizaciones parcelarias que permitan regularizar dichos terrenos y su tenencia, y decidir el aprovechamiento por parte de otras instituciones del Estado.

Los ejecutivos del CEA, entidad que está en proceso de eliminación, denunciaron en mayo pasado que “poderosas mafias”, compuestas por civiles, militares y policías, se han adueñado de miles de metros en terrenos en todo el país, a tal punto que de 26 millones de tareas solo quedan cinco millones.

Incluso, hay terrenos que fueron vendidos hasta cinco veces, según informe de la comisión.

Dentro de las políticas de su gestión, el presidente Abinader ha dispuesto entrega de títulos a las personas que tienen sus solares para fines de viviendas.