Las diez claves del experto en psicología Álex Rovira para reconectar con uno mismo #favoryto

En la sociedad actual es muy fácil dejar de ser uno mismo para dejarse influenciar por medios de comunicación, publicidad, redes sociales... que fomentan patrones de comportamiento y formas de relacionarse alejadas del pensamiento crítico y la capacidad para elegir de forma personal. Se puede decir que las personas se orientan más por lo que creen que deben ser y no por lo que son en realidad.

Según explica el autor Álex Rovira, fundador de la Escuela Humanista y uno de de los mayores expertos en psicología del liderazgo a nivel mundial: “Vivir de este modo significa rebajar la dignidad y la autoestima a cero, ya que la persona se convierte en una función del otro, dependiente de su aprobación, siempre pendiente de agradar a los demás y de responder lo que se espera de él o de ella”.

¿Se puede aprender a ser uno mismo? El autor de superventas como La buena crisis o La buena suerte - editado en 52 idiomas y del que se han vendido más de 10 millones de copias-, nos ofrece diez claves para lograr volver a conectar con uno mismo y empezar a considerar lo que realmente uno quiere y no lo que esperan los demás.

Conocerse a uno mismo

Para el experto, el autoconocimiento consiste en saber a priori cómo actuamos y cómo sentimos nuestra percepción ante ciertos cambios. Se trataría, según Rovira, de observarnos a nosotros mismos como si de un ente tercero se tratara. “Ten en cuenta que para lograr saber quién eres y lograr ciertos cambios va a ser necesario abrir un proceso de mejora de nuestra propia identidad”, añade.

Trabajar la comunicación asertiva

Rovira opina que si ocultamos constantemente lo que queremos y lo que nos interesa, eso nos terminará esclavizando. “De nada sirve ser uno mismo cuando no hay nadie mirando; hay que apostar por la autenticidad prácticamente siempre”, afirma.

Entender que la vida no es una competición

Como explica Álex Rovira, basta con seguir avanzando, sin necesidad de competir con nadie y sin necesidad de compararse con los demás. Hay que entender que todos somos distintos y no confundir ser distinto con ser mejor o peor o superior o inferior.

“Una vez que puedas sentir de verdad que 'las personas son mis camaradas', tu manera de ver el mundo cambiará drásticamente. Ya no lo percibirás como un lugar peligroso ni te verás asaltado por dudas innecesarias. El mundo te parecerá un lugar seguro y agradable. Y se reducirán drásticamente tus problemas asociados a las relaciones interpersonales” dice Rovira.

Desmitificar a los demás

La mejor manera de dejar de intentar ser idealizado por los otros, es dejar de idealizarlos a ellos. “Conseguirlo es en parte una cuestión de trabajar la autoestima y darnos cuenta de que también nosotros, si quisiéramos, seríamos capaces de juzgar negativamente a los demás por todo tipo de motivos arbitrarios si quisiéramos, pero que podemos darnos cuenta de que eso no tiene ningún sentido y que, por consiguiente, alguien que hace eso con nosotros obedece a un criterio pobre de cómo son las personas”.

Aceptar nuestra propias contradicciones

Para este experto en psicología del liderazgo nadie tiene una personalidad completamente consistente y definida y, de hecho, son las ambigüedades y la incertidumbre lo que hace que no seamos totalmente previsibles. “Es inevitable que ciertas situaciones produzcan tensiones en nosotros, que nos hagan dudar acerca de cuál es la opción que mejor nos representa, y que nos arrepintamos de ciertas decisiones pasadas. Eso no anula el hecho de que podamos comportarnos de manera auténtica, siendo fieles a nosotros mismos”.

Valorar la honestidad

Según Rovira, ser franco con los demás suele generar un efecto en cadena: facilita que quienes nos rodean también sean honestos con nosotros. “Apostar por la honestidad genera espacios en los que es mucho más sencillo ser uno mismo, y a la larga eso nos lleva a ser auténticos, casi sin darnos cuenta de que estamos rompiendo todo tipo de límites que en el pasado llegaron a lastrar nuestra manera de socializar con los demás”.

Escuchar nuestras necesidades

Para el experto si escuchamos a nuestro cuerpo cuando pide descanso y sueño, también "hay que escuchar a la mente cuando quiere nutrirse de cosas que la estimulen y la hagan revivir y al alma cuando te demanda paz y sosiego”. Rovira insiste en que conectarse a las necesidades “permite vivir mejor y también te permite saber cómo eres”.

Iluminar el aquí y ahora

"Deberíamos vivir más intensamente el aquí y ahora. El hecho de que pienses que puedes ver el pasado o predecir el futuro demuestra que en lugar de vivir con intensidad, el aquí y ahora, vives en una luz tenue. Lo que sucedió en el pasado no tienen nada que ver con el aquí y ahora, y lo que pueda suceder en el futuro no es algo que pueda determinar ahora tampoco. Si vives intensamente en el aquí y ahora, todo eso dejará de preocuparte", explica Rovira.

Desprenderse de las relaciones basadas en la dependencia

Hay que aprender a reconocerlas y desconectar de ellas porque “las relaciones caracterizadas por la dependencia son un lastre para el desarrollo personal, además de generar muchas fuentes de malestar o incluso exponernos a las dinámicas de maltrato psicológico”.

Procurar ser una persona de logro

“Puedes lograr el éxito sabiendo que, en absoluto, alcanzarlo implica tener miles de seguidores en una cuenta de redes sociales ni miles de billetes en una cuenta de banco”. Para este gurú del liderazgo el verdadero éxito se encuentra en permitirse ser uno mismo y disfrutar lo más posible del camino hacia el horizonte que cada uno se fija en su desarrollo.